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Será lo mismo… Pero ojo con la tercera vía


Como todos sabemos el pasado 31 de agosto se cerró el mercado de fichajes para la temporada 2010-2011. Se cerró de momento, pues en diciembre se reabrirá de nuevo para que los equipos que crean necesario reforzar sus plantillas lo hagan. Es preciso señalar que el mercado futbolístico se rige por principios en muchos casos alternativos y casi contrarios a los de cualquier mercado económico que se nos ocurra. Es un mercado en el cual confluyen los intereses de demasiados agentes e intermediarios. A uno de ellos se le puede calificar como el motor de dicho mercado, los medios de comunicación especializados: A ellos les interesa que los equipos de su localidad o país compren y vendan durante el parón veraniego, pues sino fuera así nadie consumiría sus productos.

Algo está cambiando en el panorama futbolístico internacional. Cada vez más son los clubes de futbol que optan por profesionalizar su gestión. Es decir, dejan de guiarse por la intuición y las sabidurías populares (como se suele decir, de fútbol puede hablar cualquiera) y tratan de hacer más racional y científico la forma de entender el deporte rey.

Observando el devenir en la tabla clasificatoria de algunos equipos durante los últimos años podemos extraer varias conclusiones acerca de cómo de ineficiente es este mercado y más particularmente de cómo son gestionados algunos clubes de fútbol. Para poder obtener una visión global y sólida sobre este mercado es preciso tener muy en cuenta el largo plazo y casi tildar de irrelevante el corto plazo.

Si nos fijamos en la dinámica deportiva de los principales equipos españoles en los campeonatos tanto nacionales como internacionales durante los últimos 5 años podremos llegar a explicar e incluso predecir posibles resultados. En el estudio realizado por Simon Kuper y Stefan Szymanski se concluyó (entre otras muchas cosas) que había una correlación muchísimo más grande entre posición-salario que posición-precio de fichaje. Es decir, que en el medio-largo plazo era mejor subirle el sueldo a un jugador propio que gastárselo en traer a otro nuevo. El caso más sangrante es el del FC Barcelona y el R. Madrid, el primero ha mantenido una base de jugadores a lo largo de 5 años, mientras que el segundo no termina de encontrar un “modelo deportivo” eficiente, vendiendo y comprando a jugadores de forma casi enfermiza buscando el éxito inmediato y encontrando el vacío más. Y los resultados hablan por sí solos, mientras que uno ganó un par de ligas y se desinfló el otro ha seguido una progresión que le ha llevado a ser el mejor club del mundo del último lustro.

Esto en parte puede explicar la progresión de equipos como el Atlético de Madrid que ha conseguido mantener a sus principales pilares construyendo a su alrededor un proyecto deportivo serio o el Sevilla FC cuya política de fichajes destaca gracias a la brillantez de su responsable el cual ha sabido entender a la perfección la ineficiencia y las consiguientes oportunidades que otorga el propio mercado. Incluso podemos buscar casos parecidos en el extranjero. El ManU y el Arsenal mantienen desde hace tiempo a sus gestores deportivos (Ferguson y Wenger), mientras que el ManCity y el Liverpool los cambian frecuentemente por lo que sus éxitos se presumen más difíciles que los de sus otros dos oponentes.

Por tanto, parece claro que esta Liga terminará con el mismo dominador que las pasadas y con la presencia de nuevos equipos en las posiciones de arriba como alternativas claras al titulo, en detrimento de otros cuya inestabilidad y ansia no permite que su potencial salga a relucir de forma total. Y que siga así.

By Alvaro

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El deporte, ¿el verdadero motor de las economías?


Se acerca el Mundial de Sudáfrica 2010. Todo está casi listo, los estadios prácticamente preparados, las plazas hoteleras casiagotadas, millares de billetes de avión ya han sido reservados, todos los medios de comunicación sin excepción preparan reportajes, documentales, folletos y programación sobre el evento. Y mientras tanto el país se va engalanando para recibir a las 32 mejores selecciones del mundo.

Es una realidad, el deporte mueve masivamente a la sociedad moderna. Todo lo que gira en torno al deporte, y en especial al fútbol, se magnifica. Es curioso, como en tiempos de aguda crisis económica todas las partes implicadas en este tipo de eventos son capaces de conseguir financiación. Los patrocinadores están dispuestos a invertir importantes sumas de dinero y de recursos para que su imagen vaya asociada a tal evento o a tal selección. Pero no olvidemos que esto es fútbol, el “deporte rey” y todo lo que toca se convierte en oro por lo que las empresas implicadas en este tipo de eventos afirman casi con certeza que rentabilizaran la inversión (algo parecido les debió de decir Florentino Pérez a los responsables de Caja Madrid el verano de 2009). Algo tiene que tener el deporte que abre la mentalidad de la gente, teletrasportándola a otra realidad en la cual el dinero sale de debajo de las piedras. Lo que demuestra una vez más que las personas y las empresas funcionan a base de incentivos.

Ejemplo: En un sitio te suben los impuestos y te dicen que sigas consumiendo que sino no salimos de esta, pero no te dicen en donde ni como ni cuanto te van a dar al terminar, solo que apoquines y luego ya se irá viendo, porque el futuro es incierto y más ahora. En el otro bando te dicen que les dejes tu dinero, que con el van a montar un circo del 15 allí donde el viento da la vuelta y que va a venir gente de todos sitios del planeta, y que al final del circo te darán el doble de lo que les distes.

En mi opinión Sudáfrica es la sede perfecta para la organización del Mundial 2010. Un país africano, emergente, con gran potencial de crecimiento económico, en el que se están asentando las bases para una convivencia civil y así conseguir una estabilidad política muy importante e impropia, hoy por hoy, del continente africano y con experiencia más que contrastada en la organización de este tipo de eventos.

El Evento será seguido desde todas las partes del planeta, se estima que al término del Mundial alrededor de 26 mil millones de personas lo habrán seguido, se crearán más de 150.000 puestos de trabajo (más de uno se estará tirando de los pelos al otro lado del Estrecho), el número de turistas durante el mes de junio se multiplicará por más del triple, unos R21.7mil millones será inyectados en la economía doméstica del país. El consumo dentro del propio país se disparará muy por encima de la media mundial actual, la velocidad con la que el dinero cambiará de manos se incrementará y muchas personas y organizaciones se verán beneficiadas. Por otro lado, lo mejor de todo esto es que el país organizador casi no desembolsará un solo dólar, pues es la propia FIFA la más interesada en que esto salgo bien, pues en juego están su prestigio y su poder de influencia sobre los patrocinadores que hacen que esta cita sea posible cada 4 años.

De la noche a la mañana como quien dice, Sudáfrica pasará a contar con una cantidad de recursos económicos y sociales que de ser bien gestionados convertirán al país en una referencia internacional. Ahora se entienden muchas cosas como el empeño de Ruiz-Gallardón en que Madrid sea algún día sede de unos JJ.OO, y por tanto no se entiende el empeño de otros en que esto no sea así. ¿Son los grandes eventos deportivos y sus derivados una parcial pero práctica solución a la crisis?¿Es la FIFA el FMI tan esperado por Europa?¿Es el fútbol el negocio perfecto, pues es de los pocos en los que se tiene la sartén por el mango desde el principio hasta el final?¿Para cuándo dejarán los gobiernos de buscar su propio interés y buscarán el bien común en forma de colaboración eficaz: orquestación?¿Por qué Joseph Blatter tiene más poder que muchos presidentes del Gobierno? Estas y muchas más son algunas preguntas que me vienen a la cabeza y a las que espero algún día daré respuesta. Mientras tanto hago lo que puedo.

by Álvaro

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