El pasado viernes fueron finalmente publicados los resultados de los stress test de la Comisión Europea de Supervisión Bancaria (CEBS, en inglés). Antes de todo expliquemos en que consisten, para poder luego analizar sus resultados. Básicamente se trata de estudiar que pasaría en el caso de que hubiese otra crisis. Para ello lo primero es describir esa situación de crisis, cuantificar en cifras que significa esto, para poder ver luego como afectaría a los bancos. Así pues, se escogen una serie de variables, por ejemplo crecimiento del PIB, salarios y paro, y se establecen qué niveles supondrían estar en crisis. Estos niveles son distintos para cada país, es decir, se establecen escenarios de crisis distintos para cada sistema financiero, y no todos son igual de graves.
Una vez creados esos escenarios se establecen 3 niveles de severidad: escenario de referencia, adverso y adverso con crisis de deuda (algo similar a lo que pasó en Mayo cuando se decía que Grecia se iba a colapsar, y la rentabilidad de los bonos periféricos se disparó). Y finalmente se somete a los distintos bancos a esas simulaciones de estrés para ver como de bien las soportan. Para ello se estiman las pérdidas que cada entidad tendría, y se va viendo como podrían afrontar dichas pérdidas. Primero se agotan las provisiones, ¡qué no es suficiente! Se agota el beneficio obtenido en el ejercicio, ¡tampoco! Se recurre a las ayudas públicas, y si esto tampoco es suficiente se ven los recursos propios del banco necesarios para afrontar las pérdidas que aún queden por cubrir. El mínimo exigido para poder aprobar el test era un 6% de ratio Tier 1, en pocas palabras, recursos propios disponibles.
Los resultados son los que veis en la tabla, y como podéis observar hay 5 entidades españolas suspendidas (de los 7 suspensos en toda Europa). Se sometieron al test 91 bancos europeos, de los cuales 27 eran españoles. ¿Pero cuales son las claves para entender estos resultados?
- Representatividad. El CEBS exigía una representación del 50% del sistema financiero de cada país, no sólo contando bancos domésticos, sino también extranjeros operando en el país. Por ejemplo, Barclays es un banco fuerte en Irlanda aunque no es su país de origen. Por ello muchos países cuentan con pocos bancos en el test (Reino Unido 4, Irlanda 2, etc). España presentó 27 entidades, un 95 % de su sistema financiero. De ahí, que en España haya tantos suspensos, por que ha sido examinada en su práctica totalidad. De haber sido así en otros países habría muchos más suspensos.
- Transparencia. España ha sido la más transparente, la única que se ha desnudado ante los mercados, y esto el mercado lo premia. La bolsa que más ha subido en lo que va de semana es la española. No se ha premiado la nota del examen, sino la valentía de presentarse.
- Escenario Macro. Las condiciones de los escenarios de crisis, que como habíamos comentado eran distintas para cada país, son mucho más severas en España. Es decir, el escenario adverso español es más crítico que el severo alemán.
- La deuda. Hay una cosa que los test no han examinado. Aunque como decíamos sí han incluido un escenario de crisis de deuda, este es parcial. Sólo han incluido parte de la deuda (bonos estatales) que compran los bancos, la deuda de negociación, aquella que compran y venden continuamente. Pero hay otros bonos, los llamados de vencimiento, que los bancos guardan hasta el final y no comercian con ellos. Estos no los han contado en las cuentas de los bancos, y en el caso de que un país declare impagos, las consecuencias serían graves para aquellos bancos portadores de sus bonos, y el test no las ha tenido en cuenta.
España ha salido muy bien parada de los test. Aunque son 5 las entidades que necesitaría dinero (71% del total), de los 3.800 millones € que se necesitarían en toda Europa sólo el 50% serían para España. Es decir las Españolas son varias, pero suspenden por poco, las otras suspensas –una alemana y una griega- son pocas, pero suspenden por mucho. Además los mecanismos de ayuda previstos tienen fondos más que de sobra para cubrir esos 3.800 millones €, y la mayoría de las entidades suspensas son cajas aún en proceso de integración. Conclusión: España ha sido la gran ganadora.
Tito